Fantàstico trinunfo del CASI

LA PLATA.- Nadie lo quiere admitir. Ninguno quiere subirse al carro de la victoria más allá de los dictados de la realidad. No hay quien se aventure a decirlo, pero el presente marca que el CASI de a poco se convierte en uno de los principales animadores del torneo, y quizás el rival por vencer en esta primera etapa del certamen. Ayer, La Plata Rugby lo sufrió con la derrota sin atenuantes y con una llamativa holgura, por 44 a 29.

La ambición, la contundencia y la eficacia fueron los atributos principales del equipo de San Isidro, que cerró una tarde fantástica, con seis tries. Posee, además, la habilidad de sus backs, la solidez en el scrum y una notable convicción para encarar cada partido como si fuera el último.

Fernando Morel, uno de los entrenadores del CASI, fue contundente con sus palabras. "Para nosotros, venir hasta La Plata y ganarle a uno de los mejores equipos que hay en el campeonato es muy importante. Este es un plantel muy joven y que necesita de este tipo de resultados para convencerse de lo que puede lograr. La idea es seguir mejorando partido tras partido para clasificarnos con tranquilidad y después ver cómo seguimos y hasta dónde podemos llegar", analizó el coach.

Es cierto que ayer La Plata Rugby fue una sombra del conjunto que venció a Alumni, en Tortuguitas, la fecha pasada. Nada le salió a favor. Perdió en casi todas las formaciones fijas. También cometió demasiados errores en el manejo de la pelota, sobre todo en el centro de la cancha, y cuando debió presionar y apretar las marcas con fe y confianza, no encontró la fuerza ni la justeza para hacerlo. Así y todo, en la segunda mitad mejoró el line out y a partir de esa instancia de juego alcanzó el punto bonus por haber marcado cuatro tries (fueron importantes el entusiasmo y la conducción de Albarracín durante los últimos minutos). Tal vez el punto bonus fue el premio consuelo, pero que recién se apreciará con más valor si es que le es imprescindible para avanzar a la Zona Campeonato.

Tal vez un triunfo de este calibre es lo que necesitaba el CASI para alimentar su confianza. Ayer tuvo sus puntos altos en Méndez y Juan Figuerola, y en un pack que siempre saca a relucir su estirpe de batallador. Habrá que tenerlo más en cuenta al equipo de San Isidro.